• Esta ampliación de la oferta anticonceptiva es parte de los esfuerzos para fortalecer el derecho a la salud sexual y reproductiva.
• Se recomienda el uso dentro de los 5 días posteriores a la relación sexual, pero cuanto antes se utilicen, mayor es su eficacia.
• Las píldoras anticonceptivas de urgencia impiden el embarazo al evitar o retrasar la ovulación y no pueden provocar un aborto.
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) introdujo la anticoncepción de emergencia para cualquier mujer que haya tenido una relación sexual con posibilidad de embarazo a partir de la publicación del lineamiento el pasado 16 de abril.
Hasta ahora este tipo de anticoncepción estaba disponible en los servicios de salud solamente para las mujeres víctimas de agresión sexual.
“Es importante aclarar a la población que estos medicamentos no son abortivos. Como parte de la educación es necesario decir que impiden la concepción, pero no malogran una concepción ya realizada” afirma la ginecóloga Angélica Vargas Campos.
El anticonceptivo de emergencia previene el embarazo de la misma manera como lo hacen las pastillas anticonceptivas regulares: impide o demora la liberación de un óvulo de los ovarios de una mujer o impide que el espermatozoide fertilice al óvulo.
Acceso de emergencia.
Según el lineamiento la anticoncepción de emergencia puede ser usada por cualquier mujer en edad fértil que la necesite en todos los niveles de atención.
La medicación anticonceptiva debe tomarse lo antes posible después del coito sin protección y dentro de un plazo máximo de 120 horas.
Sin embargo, se informará a la solicitante que la eficacia de esta anticoncepción se reduce cuanto más se prolongue el intervalo entre la relación sin protección y la toma de del medicamento.
El objetivo de abrir el acceso a este recurso anticonceptivo es brindar diversas posibilidades para ajustarse a la situación, las características y las necesidades de cada persona y para impactar de forma positiva en la salud sexual de la población.
Según la Organización Mundial de la Salud las mujeres con riesgo de embarazo indeseado tienen derecho a la anticoncepción de urgencia y por eso los métodos deben integrarse en todos los programas nacionales de planificación familiar.
Por lo tanto el lineamiento de la CCSS pone al día de esa recomendación los servicios de salud nacionales y es coherente con ese esfuerzo internacional.
Casos de uso probables.
La anticoncepción de urgencia puede utilizarse en diferentes situaciones después de una relación sexual.
El lineamiento de la Caja describe las razones frecuentes descritas en el “Programa nacional de indagación científica para la educación en ciencias y la Federación internacional de gineco-obstetricia” donde expone algunas situaciones en las que la anticoncepción de emergencia puede ser utilizada. Entre ellas están las siguientes:
- Cuando no se usó un método anticonceptivo.
- Cuando el anticonceptivo fue utilizado de manera incorrecta: por ejemplo, interrupción u olvido consecutivo de tres o más píldoras y retraso de más de dos semanas en la colocación del inyectable.
- Cuando se usó el método correctamente, pero se observó su falla: por ejemplo, cuando un condón se rompe o un diafragma se sale de su lugar.
- Cuando una mujer desprovista de protección anticonceptiva eficaz es atacada y sucede la violación.
Según la literatura médica los efectos secundarios derivados del uso de las píldoras anticonceptivas de urgencia son similares a los de las píldoras anticonceptivas orales: náuseas y vómitos, ligero sangrado vaginal irregular, y fatiga.
Estos efectos secundarios son poco frecuentes, leves y normalmente se resolverán sin necesidad de ninguna otra medicación.
Los fármacos utilizados para la anticoncepción de urgencia no dañan la fertilidad futura. Después de tomar píldoras anticonceptivas de urgencia se recupera la fertilidad sin demora alguna.
Efecto esperado: disminuir embarazos no deseados
La anticoncepción de emergencia también pretende favorecer la disminución de la alta tasa de embarazos no deseados.
Según la Encuesta Nacional de Salud Sexual y Reproductiva (Ministerio de Salud, 2015), señala que entre las personas entrevistadas el 49,8% de las mujeres y 32,2% de los hombres no deseaban su último embarazo.
En algunos casos porque deseaban esperar a otro momento (13,7% de las mujeres y 10,7% de los hombres) y en otros porque del todo no deseaban tener más hijos (36,1% de las mujeres y 21,5% de los hombres).
Teniendo en cuenta ese índice de embarazos no deseados en la población en general el lineamiento instruye la prescripción de la anticoncepción oral de emergencia con medicamentos tomados.
Objetivo asociado: ofrecer educación además del medicamento
Al facilitar información sobre el uso de las píldoras anticonceptivas de urgencia también se deben dar a conocer los métodos anticonceptivos regulares disponibles y ofrecer asesoramiento sobre cómo utilizar correctamente los diferentes métodos en caso de que se perciban fallos en el método utilizado.
El procedimiento de consejería para realizar un acompañamiento integral busca que la usuaria tome una decisión informada, autónoma y responsable.
Como parte de esa charla los funcionarios realizarán las siguientes acciones:
- Indagar sobre posible violación sexual y, en caso afirmativo, activar el protocolo de atención integral a víctimas de violación sexual en edad joven y adulta, que se ejecuta tras las primeras 72 horas de ocurrido ataque.
- Preguntar acerca del método anticonceptivo utilizado regularmente, esto para brindar información clínica sobre su uso correcto o, en caso de no tenerlo, para prescribir junto a la anticoncepción de emergencia un método anticonceptivo regular.
- Indagar si es una usuaria con reincidencia en la solicitud de anticoncepción de emergencia y, en caso afirmativo, se deberá realizar la consejería, la prescripción y emitir la referencia a consulta al ebáis para facilitar la consulta integral de anticoncepción.