BALDES DE AGUA FRIA DE LA POLITICA COSTARRICENSE

Artículo del Lic. Javier Naranjo Vargas, Abogado, correo javilunion10@hotmail.com

Se crea esperanza, “confiando” en promesas y de obtener lo esperado con fuerte ilusión; la expectativa es grande y quizás puede más la buena fe. La convicción termina en ocasiones cayendo en una persona o grupos  como  BALDES DE AGUA FRIA (frase popular, para expresar que sucedió algo que fue totalmente inesperado, el cual deja a una persona perpleja o desconcertada. Brainly.lat)

Así es la ilusión de la política Costarricense, de 26 partidos validados en la papeleta presidencial, tras un proceso de conformación de estructuras, integrantes a representación legislativa, cuadros de campañas, simpatizantes, colaboradores, financistas, fiscales y miembros de juntas receptoras. Intensas giras en cantones con promesas, proyectos y compromisos. Más todo emprendimiento tiene su inicio basado en ilusiones, esfuerzos propios y conjuntos, cuyo éxito depende de muchos factores asociados; en esencia que el producto ofertado guste a la mayoría y cale al corazón del elector y determinar  al “mejor” entre 25 opciones.

El elector sopesa intereses, pasiones y razones. En la elección del 6 de febrero del año 2022, caen 19 baldes de agua fría a partidos, candidaturas, y sus escasos simpatizantes reflejados en números y porcentajes. Seis partidos logran salvarse del “bañazo”, como dice el costumbrismo tico y logran elegir diputados de forma meritoria.

La segunda ronda del 3 de abril, con dos contendientes que envían sus motivaciones del porque son la mejor opción. ¿En serio todavía el PLN y su candidato creen poder sumar adeptos?, pues sí, el partido mismo es una fuerte maquinaria electoral, el apoyo de sectores públicos y privados, altamente beneficiados en el pasado, miles de puestos otorgados a personas en la función pública (Ejemplo los 11 mil que instaló en el periodo 2006-2010 en la CCSS), su anquilosada base de simpatizantes, aún herencia que respeta ideales de ancestros. Se le une la nueva élite liberal de alto ingreso, domiciliada en condominios en la meseta central y reflejados en votos del partido Liberal Progresista, suman al PLN y apoyan la candidatura del PLN, para nada potables, y afín a los intereses liberales. Dos baldes de agua fría le caen al PLN y al Liberal Progresista, cuando un sector del pueblo rural, de las costas, del sector informal y de la meseta central sin acceso a oportunidades, elige un candidato nuevo en lid política, con un partido nuevo que franquicia para su objetivo.

El candidato elegido y su partido reciben el balde de agua fría de elegir apenas 10 diputados, desfavorable a objetivos legislativos, salvo consenso con otros partidos políticos con suficiente fuerza; seis del Frente Amplio,  seis del Liberal progresista, siete de Nueva Republica, nueve de la Unidad y 19 diputados del PLN, la oposición en mayoría de 47, y apenas diez del oficialista. Otro balde de agua fría le cae a simpatizantes del Presidente triunfador, al ilusionar a miles de personas a ofertar al gobierno, al enviar su hoja de vida. Luego de 8 mil solicitudes, resulta que solo diez se eligen, lo que se busca es un alto perfil para ministros de estado; así cae miles de baldes de agua fría, sobre aquellos que “creían” posible un puesto, en especial simpatizantes del candidato. El balde de agua fría le puede caer al partido Progreso Social Democrático, si considera que el voto recibido es suyo, o si le pertenecía al candidato, ahora Presidente de Costa Rica.

El partido Progreso, sin claras estructuras en la primera ronda y frágil organización formada en segunda ronda, con el apoyo del partido unidad y sector conservador Cristiano Evangélico, cae en una dosis de realidad; consolidar los apoyos recibidos, crear liderazgos nacionales y cantonales que le permitan acceder a la próxima elección municipal, y por su puesto, alianzas convenientes que apalanquen intereses; dependiendo la función de gobierno y legislativo, cuyo éxito o fracaso, le abonará o descontara apoyo electoral. El balde de agua fría esta en la cuerda floja, y caerá a todos los partidos. ¿En serio aquellos 19 partidos pasados al patíbulo el seis de febrero, creen que pueden continuar? de la dosis de realidad recibida, parece que no, algunos no aprenden, y les gusta tropezar con la misma piedra muchas veces. Como ciudadanos costarricenses, que disfrutamos a mucha honra de un sistema democrático electoral probado en su pureza y bien dirigido por el Tribunal Supremo de Elecciones, seguimos la cotidianidad de la patria, y como dice nuestro Himno Nacional: En la lucha tenaz de fecunda labor……labriegos sencillos” y Confiamos que “..vivan siempre el trabajo y la paz!.”

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