Nació en Tres Ríos de Cartago, el día 3 de febrero de 1895 y murió en San José el 22 de marzo de 1964. Fueron sus padres el inmigrante italiano Ceferino Vincenzi Bassi y doña Susana Pacheco Fernández, costarricense.Realizó los estudios primarios en la escuela de Tres Ríos y los secundarios en el Liceo de Costa Rica. El ambiente de estos años de la infancia es de pobreza.
Los estudios superiores los realizó en la Escuela Normal de Heredia a los 22 años, no sin antes haber sido expulsado de la misma por un período, cuando tenía 18 años, por haber amenazado, en una disputa, a un profesor con un (¿falso?) revólverSiendo aún muy joven recibió lecciones de violín. Era admirador de Sebastián Bach y Beethoven. También fue un apasionado del cine. Desempeñó por mucho tiempo el cargo de Cabo de Resguardo Fiscal, en Sarapiquí de Heredia, durante unos pocos meses.
En 1917 contrae matrimonio con la señorita Vitalina Peñaranda Campos, también maestra como él. Se traslada a vivir a San Rafael de Heredia durante varios años. Luego se muda a la capital por tres años y por siete en Escazú.Viajó por algunos países, donde aprendió y escuchó a pensadores importantes de ese momento. Visitó Cuba y México. En estos lugares conoció y estableció amistad con varios escritores como José Santos Chocano, entre otros.
En 1828 viajó a París, becado por el gobierno de don Cleto González Víquez. Permanece por espacio de tres meses y en Inglaterra por 15 días. También estuvo en El Salvador de 1936 a 1938 y es nombrado Director de la Escuela Normal de Santa Ana. Ahí alcanza notoriedad y tanto le admiraron que años después crean un colegio con su nombre. El gobierno del doctor Rafael Ángel Calderón Guardia lo nombró como director del Instituto de Alajuela de 1940 a 1944. También ocupó el cargo de director general de bibliotecas públicas de 1944 a 1948. Fue catedrático de la Universidad de Costa Rica, director de la escuela de San Rafael de Heredia, profesor de castellano, caligrafía y geografía en el Liceo de Costa Rica, director del Colegio Superior de Señoritas y por fin, impartió la cátedra de filosofía en la Universidad de Costa Rica. Durante la administración de don Otilio Ulate fue enviado en misión cultural a México. Estuvo en diferentes países: Inglaterra, Francia, Italia, Suiza, Holanda, España, México, Estados Unidos, El Salvador, Cuba, etc.Recibió incontables merecimientos.
Entre otros, señalamos los siguientes: Doctor Honoris Causa de La Real Universidad de León, Nicaragua, miembro del comité France-Amerique, miembro de la Academia de Altos Estudios de Rosario de Argentina, miembro de la Sociedad de Escritores Americanos de Cuba, etc.Moisés murió en San José el 22 de marzo de 1964 a la edad de 69 años. La Asamblea Legislativa lo declaró Benemérito de la Patria el 23 de marzo de 1964.Moisés fue un pensador autodidacta. Sus estudios formales fueron elementales y él mismo los repudiaba.
No obstante, obtuvo el título de Licenciado en Filosofía por la Universidad de Costa Rica. El mismo Moisés afirma que fue discípulo de don Roberto Brenes Mesén y que de él recibió gran influencia como pensador. Admiró a Nietzsche a quien dedicó dos ensayos.Como profesor, como educador, predicó con el ejemplo.
A él se acercaban todos, cual si fuera padre o hermano, a confiarle sus penas y sus sufrimientos, bien morales, ya materiales, a plantearle dudas de carácter didáctico o filosófico, toda vez que se tenía la convicción de que en él se encontraría el consejo oportuno. Moisés fue educador, filósofo creativo, quizás como el que más en Centroamérica, periodista, escritor, novelista, ensayista de variada temática y gran fecundidad. Son más de setenta los libros que publicó e incontables los artículos periodísticos y ensayos que publicó en periódicos y revistas del país.
Entre sus libros publicados se destacan las novelas Atlante (1924); La Rosalía (1931); Pierre de Monval (1933); La señorita Rodiet (1936); y Elvira (1940); también merecen mencionar sus textos didácticos y filosóficos: Preceptos; Principios de crítica, Roberto Brenes Mesén y su obra (1918); Diálogos filosóficos (1921); Mi segunda dimensión (1923); Principios de crítica filosófica (1928); Lecturas educativas (1936); La enseñanza de la ortografía; Los ídolos del teatro (1957) El hombre y el cosmos (1961). Tomado de la prosa modernista.