Toda una vida dedicada a la docencia
Por Leonardo Jiménez Campos
Maritza Alvarado Muñoz-
Nació el 22 de agosto el año 1938 actualmente tiene 80 años de edad y reside en Tres Ríos. Oriunda de Murcia, Tucurrique de Jiménez de Cartago, Maritza Alvarado Muñoz llegó a Tres Ríos siendo una niña. Hija de Otoniel Alvarado Quirós y Doña Guillermina Muñoz Ureña y hermana de Omar (QdDg), Fernando y Liliana.
Estudió en la escuela de mujeres de Tres Ríos centro educativo donde su maestra fue doña Cecilia Zúñiga. Asistió al Colegio de Señoritas y posteriormente al Instituto de Formación Profesional del Magisterio Nacional donde logra su título de maestra en educación primaria.
A los 15 años, ante su habilidad en las ciencias y las letras le solicitan impartir lecciones en la escuela de mujeres en Tres Ríos por unos meses (posteriormente se denominaría Adela Rivas y actualmente Escuela Central) el año siguiente iniciaría labores en la Escuela de San Diego siendo directora la Prof. María Eugenia Rodríguez. En ese centro educativo permanecería durante 37 años hasta pensionarse en el año 1987 ocupando la dirección la Prof. Mercedes Mesén.
Contrajo matrimonio con Don Walter Sánchez Monestel con quien procreó a su única hija Rocío Sánchez Alvarado quien es también educadora en el Colegio de San Luis Gonzaga e imparte lecciones en una universidad de Cartago. Tiene una nieta de 20 años estudiante de medicina.
Su carrera docente la realizó en la Escuela de San Diego centro educativo al que inicialmente se trasladaba caminando ya que no había autobús y el camino en buen estado llegaba hasta el Beneficio Castro.
“Fue una época donde se trabajaba tanto educando a los infantes como en dotar a los niños de mejores condiciones de estudio, realizando actividades para que los estudiantes contaran con pupitres, uniformes, zapatos y mejores instalaciones” comenta.
“En la Escuela se daba agricultura, costura, música, religión y consejos a los niños y padres de familia. Se enseñaba a escribir en manuscrita e imprenta. Fui una maestra muy exigente con mis estudiantes debían conocer la materia y aplicarla. Les explicaba todo y debían después aplicarlo” destacó.
Colaboró activamente en las gestiones de construcción del Liceo de La Unión hoy Colegio Técnico Mario Quirós Sasso, luego de que un incendio acabara con las aulas contiguo a la iglesia de Tres Ríos donde inicialmente se impartían lecciones.
Ha sido toda su vida afiliada a organizaciones gremiales educativas de las cuales ocupó cargos en sus juntas directivas.
Pese a haberse pensionado en 1987 aún recibe a jóvenes a quienes les da lecciones en distintas materias. Fueron 37 años de carrera dedicada a la niñez y juventud cantonal.
“La gente de San Diego en aquél momento eran agricultores, campesinos, gente muy trabajadora. Al inicio de mis labores de docente para salir del lugar se salía o entraba a pie o en caballo”
“A los jóvenes mi consejo: que estudien, estudien y estudien que sean ciudadanos de bien”
“A los nuevos y actuales maestros que amen esta bella profesión de la cual si volviera a nacer, la volvería a escoger”