- Academia Costarricense de la Lengua celebra su centenario con exposición inspirada en la vida y obra literaria de sor Juana Inés de la Cruz
- Colectivo Grabado-Mujer aporta 40 obras que constituyen exlibris como parte fundamental de la muestra
“De siempre, la literatura se ve acompañada -y acompaña- la música y la danza, las artes decorativas y la ilustración y, desde el siglo XX, las artes audiovisuales. La obra literaria de sor Juana Inés de la Cruz (México 1648 – 1695), cumbre de las letras coloniales hispanoamericanas, es un punto de encuentro que convoca la reflexión sobre esos estrechos lazos, así como sobre muchas de las transformaciones y luchas que enfrentan las sociedades actuales de nuestro continente”, expresó Alexánder Sánchez, miembro de la Academia Costarricense de la Lengua y coordinador de la exposición Yo, la peor del mundo: la poesía de la imagen.
Con una pensada y bien lograda exhibición, que se inspira en la vida y obra de esta religiosa y escritora de pluma barroca, la Academia Costarricense de la Lengua celebra su centenario (1923-2023) en la que es su sede y la del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural.
“La Academia Costarricense de la Lengua y el Colectivo Grabado-Mujer han acordado colaborar para entablar un diálogo entre la obra literaria de esta figura cimera de la literatura en lengua española y el talento del arte gráfico costarricense. Con esta actividad, la Academia engalana su efeméride y cumple con sus fines estatutarios de promover el conocimiento y estudio del patrimonio literario”, amplió Víctor Manuel Sánchez, presidente de esta organización.
¿Por qué sor Juana Inés de la Cruz? “En sus glorias y en sus desdichas, sor Juana es actual. Su rol atípico de mujer intelectual en un mundo misógino, marcó su trayectoria vital y la conecta con las luchas de las mujeres del siglo XXI. En los abundantes escritos de esta monja jerónima se conjuga una enorme cantidad de preocupaciones y temáticas propias de la sociedad mexicana de su momento, pero que nos continúan hablando de la condición femenina en todas las épocas”, acotó el presidente de la Academia Costarricense de la Lengua.
“La severidad, esa seriedad asociada con la fama y la inmortalidad, han ocultado otras facetas posibles de la mujer tras la poeta y la monja. Sor Juana -y eso lo dejan entrever sus escritos-, fue una persona de sentimientos y afectos profundos e intensos. Sus meditaciones abarcaron la más compleja gama de emociones. Esa Juana Inés, divertida y juguetona, celosa y comprometida, arriesgada y retadora, airada e impertinente, esa ser humana rica, no ha sido suficientemente explorada por la plástica y es una deuda pendiente que debe comenzar a ser saldada.
Imagen: Celos. Linóleo de Carolina Córdoba, integrante del Colectivo Grabado-Mujer. Cortesía de la artista y ACL.
El proyecto pretende explorar las posibilidades de relectura de esa otra Juana, la menos conocida, la íntima, la invisibilizada por una imagen pública construida desde la mirada masculina del poder, la fama y la gloria”, apuntó el coordinador de la muestra, quien también elaboró el guion científico.
Yo, la peor del mundo: la poesía de la imagen es una exhibición que hilvana mediante un guion educativo, seis ejes temáticos. Luego de la introducción, continúa con: Una vida admirable, La curiosidad de Sor Juana, Mujer, monja y poeta, Sor Juana se defiende y Sor Juana en la cocina.
Estos ejes temáticos se plantean mediante un hilo conductor que amplía la información con textos históricos e invita constantemente al público a interactuar con la muestra mediante diferentes recursos didácticos.
Como dato innovador, la exhibición incluye varios memes, además de una línea de tiempo, así como diversos objetos literarios y artísticos, entre estos: matrices, prensa e instrumentos de grabado y algunas reproducciones de objetos de época como plumas para escribir, un astrolabio y un reloj de arena, entre otros que dan fe de la constante búsqueda del conocimiento por parte de la escritora.
Desde las 40 obras hechas por las integrantes del colectivo Grabado-Mujer, la muestra explora e interpreta las facetas de la escritora. Son grabados cuyo tamaño máximo se fijó en 13 centímetros por lado y constituyen 40 exlibris, uno por artista.
El exlibris es un sello que se estampa en el reverso de la cubierta de un libro, o bien, en su primera hoja en blanco, para indicar quién es su propietario o a cuál biblioteca pertenece el ejemplar. Estos pequeños grabados se muestran acompañados de dos cédulas: una con información de la obra y su autora; y otra, con el texto literario de sor Juana Inés de la Cruz que lo inspiró.
Nosotras Juana. “Las diferentes voces que unen y conforman el Colectivo Grabado-Mujer abrazamos la convocatoria Yo, la peor del mundo: la poesía de la imagen con entusiasmo y dispuestas a entrar en la huella y voz de la escritora latinoamericana más controversial del siglo XVII; quien logró trascender en el tiempo y cuya fuerza en la palabra significó un enfrentamiento en una sociedad patriarcal, donde la mujer era considerada un adorno incapaz de pensar y actuar, sin derecho a la educación.
Para las grabadoras fueron meses de investigación, enriquecimiento e intercambio de saberes, ya que tanto la temática como la técnica empleada en la obra lo exigían. Llevar la palabra a la imagen, es permitirles a las sensaciones navegar, sintetizar y también dialogar con la creatividad, porque en el proceso entramos en las zonas de la meditación, de los sentires fluyendo, para ser plasmados en un espacio que no sobrepase los 13 x 13 cm.
Nosotras Juana tinta y papel, rodillo y pluma, palabra que es imagen, que cuentan para quienes deseen escuchar y ver, pero también, una voz para las voces que aún callan”, reflexionó Li Briceño, coordinadora del Colectivo Grabado-Mujer.
Exposición abierta hasta el 8 de diciembre de 2023, de lunes a viernes, de 8 a.m. a 4 p.m., en el Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural, avenida central, San José.